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Este mes de noviembre, los líderes mundiales de casi 200 países se reunirán en Glasgow, Escocia, para celebrar la 26ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26). Se trata de la cumbre climática más importante desde la firma del Acuerdo de París en 2015.
Si bien no resolverá por arte de magia la crisis climática, las promesas que se hagan allí pueden representar un paso decisivo para acabar con la era de los combustibles fósiles de una vez por todas.
Pase lo que pase en la COP26, tenemos esperanza, porque estamos ganando y resistiendo, y las comunidades se están uniendo en todo el mundo para afrontar la crisis climática y hacer que quienes la perpetúan se hagan responsables.
Con el poder de las personas y con la presión en las calles y en la red, los bancos y los gobiernos se verán obligados a comenzar a actuar a la escala y la velocidad necesarias. Daremos un paso adelante y nos haremos escuchar.
Diles a los líderes políticos de los Estados Unidos, del Reino Unido y de la UE:
Financien una transición justa para todos los países del mundo
A: Boris Johnson (Reino Unido) Joe Biden (Estados Unidos), Ursula von der Leyen y Charles Michel (UE).
Hoy personas de todo el mundo están luchando contra las consecuencias de la crisis climática: sequías extremas, incendios forestales, tormentas e inundaciones. Pero ustedes son verdaderamente los que deben actuar para evitar aún más sufrimiento.
La decisión correcta es una sola: los países ricos, que son los que financian los combustibles fósiles, deben desinvertir ese dinero y destinarlo a una transición energética justa, limpia y 100% renovable para todas las personas del mundo.
Desde los distintos rincones del planeta, les exigimos que:
- Contribuyan en proporción a su riqueza: incrementen y cumplan sus compromisos de financiación de la lucha contra el cambio climático.
- Dejen de financiar los combustibles fósiles: pongan fin a todo apoyo a la industria del carbón, el petróleo y el gas, en todo el mundo.
- Financien una transición justa: Inviertan su dinero en soluciones viables y en energía limpia y 100% renovable para todxs, para evitar que cualquier país o trabajador sufra por quedar fuera del sistema.
El mundo no se está acabando, pero la era de los combustibles fósiles sí. Personas de todas partes del planeta se están movilizando contra este tipo de combustibles y contra quienes financian la tóxica industria del carbón, el petróleo y el gas.
Los bancos comerciales y privados nunca se moverán a la escala y la velocidad necesarias para detener la crisis climática, así que es hora de que los gobiernos ricos den un paso al frente y se aseguren de que sus sistemas bancarios dejen de financiar los combustibles fósiles y empiecen a financiar la transición justa.
Seguir destinando dinero a los combustibles fósiles significa financiar a propósito un desastre climático. Necesitamos que los países más ricos del mundo aumenten ahora mismo su contribución económica a la lucha contra el cambio climático: dejen de financiar los combustibles fósiles e inviertan, en cambio, en soluciones para la crisis climática en todo el mundo.
Día de Acción Global por la Justicia Climática – 6 de noviembre
La Coalición de la COP26 está organizando movilizaciones masivas y descentralizadas en todo el mundo. Estas congregarán a diferentes movimientos con el fin de generar el poder para un cambio de sistema: desde las luchas indígenas a los sindicatos, desde los grupos de justicia racial a lxs jóvenes que se movilizan por el clima.