Por Ignacio Zavaleta*

Una falla en un oleoducto de 16 pulgadas del sistema troncal de oleoductos de la compañía OldelVal, que transporta el petróleo que se produce en la Cuenca Neuquina, generó un derrame de gran dimensión. A través de varios videos publicados  por Daniel Lezcano, se puede reconocer como el petróleo se escurrió en la tierra llegando inclusive a la corriente del Río Negro, en la principal zona productiva de Río Negro, Patagonia Argentina.  

Ante lo sucedido, 350.org analiza la actual situación que deja en clara evidencia  las consecuencias que genera la extracción de combustibles fósiles. Una industria que acumula subsidios millonarios del Estado y que no invierte en seguridad en una actividad de alto riesgo sobre el hábitat, dando lugar a que se produzcan este tipo de desastres, previsibles, predecibles y evitables que afectan zonas de producción, cursos de agua de superficie y subterráneos.

350.org, ha reclamado y denunciado los efectos de la grave contaminación e impactos negativos de la industria, en la región de Vaca Muerta que impacta en zonas de producción agrícola y áreas urbanas ante los ámbitos de Gobierno de las provincias de Neuquén y Río Negro, como también con acciones judiciales en la última década. 

En el siniestro actual, gran volumen de petróleo se derramó en el suelo y en el rio,  pero “las causas del hecho aún continúan en investigación” como indica el comunicado oficial de la compañía Oldelval

Conoceremos en semanas las sanciones  que el área de incumbencia  del Gobierno  impondrá a la compañía, y las causas del hecho, pero ni las sanciones ni las causas por las que se produjo el derrame, cambiarán el estado de desidia estatal, que ignora su responsabilidad ante la Ciudadanía en cuestiones de salubridad, ambiente.

350.org afirma que la sanción será meramente “simbólica” como es habitual en estos casos, teniendo en cuenta el historial de reiteración de siniestros, por lo que debemos enfatizar ante la Ciudadanía que las sanciones no modifican el daño producido, acumulándose uno tras otro, consecuencia intrínseca de esta actividad.

La misma secretaría de Energía de Río Negro informó que “no recuerdan un derrame de tales dimensiones”. Por ello, es vital tomar conciencia de los daños irreparables que generan las acciones y omisiones de toda la cadena de producción de petróleo en Argentina.

Informes oficiales de la Secretaría de Medio Ambiente de la Provincia de Neuquén, revelan los efectos negativos de la extracción de hidrocarburos en  la región a nivel socioeconómico y ambiental: “En Vaca Muerta, entre los años 2015 al 2018, hubo más de 3.400 incidentes ambientales de distinta envergadura, producto de la actividad del sector. Solo en los diez primeros meses del año 2018 se identificaron 934 incidentes. Es realmente un verdadero desastre ambiental, sumado al impacto económico negativo de la producción petrolera en áreas de producción frutihortícola” y de provisión de agua de millones de habitantes que dependen de la cuenca hídrica duramente afectada.

350.org continuará monitoreando, investigando y accionando para que se prevengan estas situaciones con efectos negativos al hábitat en el mediano y largo plazo, brindando apoyo a los damnificados de la región.

* Ignacio Zavaleta es activista ambiental y coordinador de campañas de 350.org en Argentina.