Cáritas Internacional, bancos, diócesis y otras entidades que valen miles de millones retiran sus inversiones de proyectos ligados a combustibles fósiles
GLOBAL – Un total de 35 organizaciones e instituciones de la Iglesia Católica anunciaron este domingo (22) su decisión de romper los lazos económicos con la industria de los combustibles fósiles, principal responsable de la crisis climática global. Cáritas Internacional es una confederación de 165 organizaciones católicas de asistencia, desarrollo y servicio social que opera en más de 200 países y territorios, y está entre las instituciones que se comprometen a adherirse a la campaña por la desinversión.
Además de ella, tres bancos católicos – el Pax Bank, el Bank Im Bistum Essen eG y el Steyler Ethik Bank, que juntos administran balances financieros de aproximadamente 7,500 millones de euros -, obispos en todo el mundo y una coalición internacional de instituciones católicas – el Movimiento Católico Global por el Clima (GCCM, por su sigla en inglés) – también decidieron, en forma de compromisos parciales o totales, retirar sus inversiones de proyectos de combustibles fósiles. Estas instituciones se unen a otras 60 organizaciones católicas alrededor del mundo, que recién se adhirieron al llamado, señalando la creciente fuerza del movimiento de desinversión dentro de la Iglesia Católica.
Este movimiento ha sido impulsado por la encíclica Laudato si, lanzada en junio de 2015, en la preparación para la conferencia climática de París, y en la que el Papa Francisco enfatiza la responsabilidad de la humanidad de cuidar de la Tierra. El anuncio de ayer es un gran paso, aumentando las esperanzas de que el propio Vaticano se comprometa pronto a deshacerse de sus activos que estén ligados a los combustibles fósiles.
El presidente de Cáritas Internacional, Cardenal Luis Tagle, subrayó la importancia de la decisión para la justicia climática y social. “Los pobres están sufriendo mucho con la crisis climática y los combustibles fósiles están entre los principales propulsores de esa injusticia. Es por eso que Cáritas Internacional decidió no invertir más en ese tipo de energía. Alentamos a nuestras organizaciones miembros y otros grupos u organizaciones vinculadas a la Iglesia a hacer lo mismo.
Autoridades importantes de la Iglesia, incluyendo obispos, también están liderando el movimiento global y diverso por la desinversión. La arquidiócesis de Luxemburgo, la arquidiócesis de Salerno-Campagna-Acerno y la diócesis de la Communauté Mission de France, anunciaron ayer sus compromisos de desinversión por parte de sus diócesis, siguiendo los pasos de la Diócesis de Umuarama, en Brasil, la primera Diócesis y la primera institución de América Latina en adherirse a la campaña.
Para Reginaldo Urbano Argentino, ex presidente de Cáritas Paraná y Asesor de la Diócesis de Umuarama para asuntos socioambientales, la creciente adhesión de instituciones católicas muestra la fuerza de Laudato si y tiene el importante papel de concientizar a los fieles a asumir sus compromisos cristianos con la creación. “Nosotros de Cáritas Paraná alabamos la iniciativa del brazo internacional de la entidad, y creemos que eso debe influir en otras instituciones y en la comunidad católica de todo el mundo.
La campaña por la desinversiónde los combustibles fósiles es la que registra el más rápido crecimiento en la historia. Hoy, más de 850 instituciones, que juntas representan US $ 6,100 billones de activos en todo el mundo, ya anunciaron compromisos de desinversión.
“Ciudadanos comunes, fondos de pensiones e instituciones determinadas a no dar ni un centavo más a las energías sucias están acabando con el capital económico y cultural de la industria de los combustibles fósiles, abriendo el camino para una transición rápida y justa a un 100% de energías renovables para todos. Al retirar sus activos de los combustibles fósiles, están reduciendo la capacidad de las grandes empresas de petróleo, carbón y gas para desarrollar nuevos proyectos de extracción, mientras que los ciudadanos de todo el mundo también están actuando para interrumpir estos proyectos en sus propias comunidades”, dijo Yossi Cadan, coordinador global de la campaña de desinversión de 350.org.
Los compromisos de ayer fueron coordinados por el Movimiento Católico Global por el Clima, que también anunció su desinversión. “Cuando se trata de proteger nuestra casa común, no tenemos tiempo que perder. Desinvertir de los combustibles fósiles es importante para reducir pronto la curva de emisiones de los gases de efecto invernadero. Estamos agradecidos por unirnos al creciente movimiento de instituciones católicas que se distancian de las energías sucias y se acercan a un mejor cuidado de la creación. El liderazgo de la Iglesia en esta cuestión nunca ha sido tan importante”, afirmó Tomás Insua, director ejecutivo del GCCM.
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NOTAS A LOS EDITORES
- El Movimiento Católico Global por el Clima es una organización internacional compuesta por más de 650 organizaciones y miles de católicos que respondieron al llamado del Papa Francisco para proteger nuestra casa común.
- Cero Fósiles es una campaña global liderada por grupos locales que exigen que nuestras comunidades e instituciones locales se comprometan a: una transición rápida y justa al 100% de energía renovable para todos; ningún nuevo proyecto de combustible fósil en ningún lugar; ni un centavo más por la energía sucia.
- La lista completa de las instituciones que hoy desinvirtieron está disponible aquí, incluyendo información sobre el tipo de desinversión que anunciaron y declaraciones y contactos de prensa de organizaciones seleccionadas.