¡Hola a todos! Me llamo Teresa, soy el “componente” latino en el equipo de 350 y es para mi todo un honor poder inaugurar este blog en español. Espero que este sea el principio de muchos otros… ¡Gracias!
Hoy os quería hablar brevemente de la crisis que está sufriendo España, mi país natal, en relación con la huelga de transportistas que reclaman una bajada en el precio del combustible. Las carreteras están bloqueadas, muchos alimentos no llegan a su destino final y la violencia está llegando a las carreteras. Como todos sabemos, el precio del petróleo está aumentando en todo el mundo a un ritmo desorbitado y arrastra consigo consecuencias palpables: llenar el depósito del coche es cada vez más caro, los taxis están por las nubes, los alimentos en general está subiendo sin parar… ¿A dónde vamos a llegar? Ahora son los trabajadores del sector transportista quienes protestan porque ven empeorar su calidad de vida, pero esta crisis se podría extender fácilmente a otros sectores. Nadie queda libre del alcance de este problema global.
Y a todo esto, ¿se puede poner solución? Es evidente es que no podemos seguir igual que hasta ahora. La crisis del precio del petróleo está directamente relacionada con el cambio climático y muchas personas (y políticos) parecen olvidarlo. Nuestros líderes políticos deberían entender de una vez que no se trata tanto de combatir a los huelguistas (que están ejerciendo su derecho) sino de abordar el problema de raíz, y el mejor modo de hacerlo es cambiar la política ambiental empezando desde hoy mismo.
Ya vivas en España, Uruguay o Groenlandia, todos tenemos algo en común: necesitamos frenar el cambio climático si no queremos que sea el cambio climático el que frene nuestro ritmo de vida actual.