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Desde que Javier Milei asumió la presidencia el 10 de diciembre de 2023, su gestión no ha parado de anunciar medidas y proyectos de ley en línea con su ideología; pero que superan ampliamente lo que la sociedad argentina imaginaba. Aquí les presentamos un resumen y ponemos el foco en el ámbito ambiental y energético. 

La gestión de Milei está jugando al ajedrez contra gran parte del pueblo argentino. Argumentan que la herencia del gobierno anterior los obliga a aplicar cambios radicales y drásticos. Y es así como su jugada se ha basado en el movimientos de 3 piezas claves: las medidas de emergencia anunciadas por su ministro de Economía, el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) y el proyecto de ley llamado “Ley Ómnibus”. Estas 3 piezas han sido presentadas durante las primeras 3 semanas de gestión y han sacudido todas las escenas: política, económica, cultural, ambiental y social. 

Un poco de contexto: ante las medidas y nuevas políticas anunciadas, el miércoles 24 de enero se realizó un paro nacional donde se movilizaron sindicatos, organizaciones de la sociedad civil y cientos de miles de personas frente a la Casa de Gobierno. Sin embargo, horas antes de esta movilización y luego de negociar cambios en el proyecto de ley, el Gobierno consiguió el dictamen de mayoría en el plenario de comisiones en la Cámara de Diputados. Es decir, este próximo jueves 25 la ley podrá ser debatida en el Congreso. Mientras tanto, el DNU entró en vigencia desde el 29 de diciembre del año pasado, y hasta que el Congreso no lo trate, los cambios que propone continuarán tal cual.

• Firma la petición para frenar los retrocesos en Argentina

¿Cuál es la diferencia entre el DNU y la Ley Omnibus? Mientras que el megadecreto de Milei propone desregular una gran variedad de sectores económicos, y poner así en peligro áreas naturales protegidas; el paquete de leyes de la Ley Ómnibus se centra en políticas que, según la Constitución, sólo pueden ser modificadas por el Congreso. Este proyecto de ley incluye reformas profundas en materia tributaria, laboral, penal, energética, electoral y de protección ambiental.

¿Dónde radica el peligro y retroceso en términos climáticos y ambientales?

🗣 En las calles suena “Candombe para Milei”, donde se escucha “al Congreso yo le pido escuche bien, que no apruebe esa ley”🎵#EncendamosLaLuchaParaQueNoApaguenLaCultura #EvitemosElApagonCultural#Cacerolazo #CacerolazoNacional #CacerolazoCultural#AbajoElDNU #NoALaLeyOmnibus pic.twitter.com/8ALMOCz6zw

— La Garganta Poderosa (@gargantapodero) January 10, 2024

 

En general las propuestas presentadas apuestan a desarticular el mercado energético reforzando las industrias de combustibles fósiles y megaminería; facilitando las ganancias en manos de privados nacionales e internacionales; desalentando todo tipo de cuidado ambiental o metas climáticas; y eliminando subsidios, agrandando el costo y la brecha de acceso a las energías.

Entre la avasalladora cantidad de medidas negativas, destacamos: 

Minería y combustibles fósiles 

• La Ley Ómnibus beneficia a la minería, modificando la Ley de Glaciares, y a las empresas petroleras, extendiendo las concesiones a 35 años. 
• Además, el DNU propone una desregulación escandalosa. Con el argumento de atraer más inversiones, pretende casi dejar sin efecto cualquier tipo de restricción y carga impositiva para la extracción de minerales. En el contexto mundial de transición energética, esto puede implicar la extracción desmedida de minerales críticos como el litio, acabando con ecosistemas enteros, con pocos beneficios y gigantescos daños para el pueblo argentino (este artículo nos brinda más informaciones).

Protección de áreas naturales 

• La “Ley Omnibus”, en sus versiones iniciales proponía importantes modificaciones en la Ley de Bosques, la Ley de Glaciares y en la Ley de Manejo de Fuego. En momentos de crisis climática, las propuestas del gobierno implican un costo terrible para la fauna y flora argentina y agravan severamente la destrucción de los ecosistemas que capturan el carbono. 
  • Ley de Bosques: es una ley clave ya que protege el 80% de los bosques de Argentina, es decir, está prohibido autorizar desmontes en esas áreas. Además, las áreas que podrían ser desmontadas, se deben hacer estudios de impacto ambiental y audiencias públicas previas. La ley también prohíbe deforestar en territorios indígenas. Las modificaciones propuestas permitirán:
    • Que los gobiernos provinciales autoricen desmontes donde hoy está prohibido, a favor de la expansión de las fronteras agropecuaria e inmobiliaria. 
    • Desfinanciar la ley, perjudicando la partida presupuestaria para los controles al desmonte ilegal y los incendios forestales. 
    • Eliminar mecanismos de acceso a información de comunidades indígenas y campesinas.
  • Ley de Glaciares: sancionada en 2010, esta ley busca preservarlos como reservas estratégicas de agua, proteger la biodiversidad, cuidarlos como fuente de información científica y valorarlos también en su potencial turístico. El proyecto ley Ómnibus:
    • Permitiría en algunos casos la actividad económica en la zona periglaciar, es decir, el entorno que se encuentra alrededor del glaciar y que permite que éste exista.
    • Elimina la prohibición de la actividad minera en la zona periglaciar. 
  • Ley de Manejo de Fuego: la nueva ley mantiene la prohibición de la quema sin autorización, pero establece un plazo de 30 días hábiles para que la autoridad competente responda. Si no hay respuesta, se considera quema autorizada. Además, para la ley, el “aprovechamiento productivo” sería motivo suficiente para avalar una quema. 

Transición Energética

El DNU ataca directamente los planes argentinos para la transición energética. En él se propone un fuerte cambio al Fondo para la Generación Distribuida de Energías Renovables (FODIS). Se dejaría sin efecto el otorgamiento de préstamos, incentivos y garantías; destinados a la implementación de sistemas de generación distribuida a partir de fuentes renovables. Sin este fondo, la tímida e incipiente transición hacia energías renovables en Argentina se ve aún más obstaculizada.

El gobierno Milei está, así, trabajando para activamente empeorar la crisis climática que ya afecta a toda la humanidad, especialmente a las comunidades más vulnerables. 

Ante la reacción del colectivo socioambiental, el cual llevó a representantes al Congreso a presentar sus preocupaciones, algunos puntos han sido modificados. Se incorporó un artículo que garantiza los recursos para el Fondo de Bosques, se modificó un detalle menor sobre la Ley de Manejo de Fuego y se aclara en la Ley de Glaciares las actividades prohibidas en la zona periglaciar. Sin embargo, son cambios tibios. En el ambientalismo la preocupación continúa. 

A pesar de que Argentina tiene una vasta legislación climática y ambiental, compromisos internacionales adquiridos y el principio de no regresión ambiental (la prohibición de retroceder en la protección ambiental ya alcanzada) las primeras medidas de Javier Milei, claramente hechas a medida de las grandes empresas y fondos financieros, pretenden desconocer años de avance de derechos y acuerdos. 

¿Cómo puedes ayudar a proteger la Argentina de esos retrocesos?

Desde 350.org, creemos que más que nunca debemos hacernos escuchar, y hacer todo lo posible para que el país RESISTA a la derogación de las leyes básicas de protección climática y ambientales. La aprobación de las propuestas del gobierno sería una catástrofe no solo para Argentina, sino también para América Latina y el mundo, e instamos la responsabilidad de los legisladores, así como de todxs lxs ciudadanxs de Argentina y el mundo, a presionar para que no avancen.

Para sumarte a la defensa de los biomas y del clima, puedes:

🖊️ Firmar la petición que organizaciones locales, nacionales e internacionales están promoviendo.

💬 Compartir la petición con tus contactos.

🤳 Publicar un mensaje o video en tus redes sociales sobre tu indignación con los ataques al medio ambiente en Argentina.

¡Movilízate ya! ✊

¡Estamos juntxs por el clima y los derechos de lxs argentinxs!

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